¿Crees en el amor? Novelas a otro nivel.
Un poco sobre Alicia Brahn
Nací en Barcelona y estoy completamente enamorada de esta ciudad. A lo largo de mi vida, me he formado en múltiples disciplinas, siempre explorando y buscando mi propio camino, como todos los adultos que seguimos en la búsqueda constante de nuestro lugar en el mundo. Hay tantas cosas que me apasionan que nunca he podido elegir una sola.
Estudié en la rama de la arquitectura, algo que sigue fascinándome, pero también me he formado en otras áreas completamente diferentes. Me encanta leer, escribir, pintar, restaurar muebles, y en general, crear cosas con mis manos y mi mente. De pequeña, siempre decía que iba a ser inventora. Me imaginaba como una especie de Leonardo Da Vinci o Thomas Edison; sí, mi mente soñaba en grande. Pero oye, ¿no es para eso que existen los sueños?
Hoy en día, puedo decir que soy inventora, pero no de máquinas o artilugios. Soy inventora de historias. Es en la escritura donde he encontrado una forma de combinar todas esas pasiones y darle vida a mundos que siempre han estado dentro de mí, esperando a salir.
Todo empezó de forma muy casual. Un día, decidí escribir algunas escenas románticas en mi perfil de Instagram, más que nada porque me divertía y siempre he tenido un gusto especial por las palabras. Para mi sorpresa, la gente que me rodea comenzó a decirme que debía hacer algo más grande, que tenía que lanzarme a escribir una historia completa, una novela.
Al principio, no estaba muy segura. Escribir siempre me ha gustado, pero hasta entonces solo había sido un hobby, algo que hacía para desconectar o simplemente por placer. Pero poco a poco, esa idea de escribir algo más serio empezó a crecer en mí. Así que, sin pensarlo demasiado, me puse a escribir. Lo que comenzó como un experimento, se convirtió en un proyecto que me atrapó por completo.
Así fue como nació mi primera novela, Un café en los Alpes. Quería crear una historia que fuera cercana, que la gente pudiera leer y pensar: "Esto podría haberme pasado a mí" o "Conozco a alguien que ha vivido algo así". Me enfoqué en crear personajes y situaciones con los que cualquiera pudiera identificarse, haciéndolos lo más reales posible. Y, por lo que me han dicho quienes han leído el borrador, parece que lo logré. Muchos me han comentado que se sienten conectados con la historia, que se ven reflejados en los personajes y que les ha tocado de alguna manera y han visto flejados sus propios sentimientos y experiencias.